Para mucha gente, enero es el mes de los buenos propósitos,
el mes en el que depositamos nuestras esperanzas de mejora para el nuevo año, el
mes en el que vamos a dejar de fumar, apuntarnos al gimnasio y dejar de echar
de menos a quien no debemos, el mes de “ya no más”.
Septiembre es el mes de la vuelta al cole, esa sensación que
permanece de por vida, estudiemos o no, tengamos hijos o no. Septiembre es el
inicio del nuevo curso escolar, o la nueva temporada, la oportunidad de aprobar
todas las asignaturas pendientes acumuladas el resto del año. Es otro momento
de buenos propósitos, de empezar alguna colección absurda por fascículos o de
volver a hacer voluntad de cambio.
A mí me gusta septiembre, todo parece coger velocidad de
nuevo. Es cierto que el verano nos empieza a abandonar perezoso, pero para los
que no distinguimos verano del resto del año más allá de la temperatura, es un
nuevo comienzo. El 15 de octubre queda cada vez más cerca y con él, la salida
del EP digital de nuestra nueva aventura: SONORA, y con ello, la vuelta al
movimiento; las entrevistas, los viajes, los bolos, la ilusión, las sonrisas…
la música. Ya no sé donde acaba mi profesión y empiezo yo. Ya no sé si música
es lo que hago o lo que soy.
Sé que para los que habéis estado de vacaciones septiembre
es un mes duro. El mes en el que termina la desconexión y volvemos a la rutina,
al día a día. También es una oportunidad para cambiar de punto de vista, de
enfoque, de actitud, para hacer un punto y aparte e intentar cambiar lo que no
nos guste de nosotros o nuestro entorno. A por ello pues.
Sea como sea, septiembre ya está aquí, y ha venido para
quedarse, eso sí, sólo 30 días.
Joel Reyes
No hay comentarios:
Publicar un comentario