lunes, 17 de noviembre de 2014

MÁS LEÑA AL FUEGO

Quedan 5 días para que termine la campaña de crowdfunding de “El fuego amigo”. La calma que da el saber que ya lo hemos conseguido permite pararse a reflexionar sobre lo logrado más allá de lo emocional. Verkami suele recomendar, una vez conseguido el objetivo inicial, lanzar un “segundo objetivo”. Yo he decidido no hacerlo, puesto que, mi segundo objetivo es afianzar el primero.

Como bien dije al principio de todo esto, tuve muchas dudas a la hora de plantear el objetivo de la campaña. Mucha gente me decía que era mejor apostar a la baja para tener más seguridad en tener éxito en la apuesta. Tras mucho hacer números, me di cuenta de que debía apostar fuerte para que el disco tuviera el trato que merece, aún así, ajusté los número hasta la expresión mínima de lo necesario para sacar adelante “El fuego amigo” con garantías.

Un disco es mucho más que grabar unas canciones. Igual que un hijo es mucho más que nacer. Ese hijo necesita ropa, alimento, cuidados, amor, mimos, etc… algo parecido ocurre con un disco, salvando las distancias, obviamente, aunque siempre digo que cada disco es como un hijo con un carácter al que dan forma cada una de las canciones que lo conforman, que a la vez son pequeñas extensiones de uno mismo.


Un disco necesita mimo y cariño en el estudio. Tiempo para trabajar con calma y macerar las ideas, para que todos los implicados puedan trabajar a gusto y sacar lo mejor de sí mismos, tiempo para que todo esté en su sitio, para que no haya sorpresas no deseadas cuando se produzca su nacimiento. Luego hay que vestirlo. Los que me habéis seguido, tanto con Malacabeza como con “Eléctrico”, sabéis que siempre me ha gustado que esos trabajos fueran acompañados de un diseño cuidado y bonito. En los tiempos en los que el CD agoniza, hay que abogar al romanticismo de tener algo especial entre las manos, tocarlo, olerlo, leer cada línea porque, como dice una de las canciones de “El fuego amigo”: “nos extrañarán cuando hayamos muerto”.

El arte de “El fuego amigo” corre a cargo de Toni Galván, del que ya habéis oído hablar en varias ocasiones, Toni es una pieza clave de este trabajo, desde el principio y hasta el final. Arte es la palabra para definir lo que Toni está preparando. Luego llega la fabricación.

Una vez el vástago ha nacido, hay que alimentarlo para que crezca. “Eléctrico” me ha mostrado la evidencia, como nunca antes, de que de nada sirve un disco si no se hace visible. El trabajo que realizó Alicia Rodríguez, en la promoción de mi trabajo anterior, fue clave en todo lo que ese disco me ha dado. Clave a la hora de plantearme el proyecto del que, ahora, muchos de vosotros formáis parte. 

Mi paja mental de hoy solo quiere concluir diciendo que aún quedan 5 días para el final de la campaña y que toda ayuda será poca para poder cuidar y mimar un poco más cada detalle de este trabajo. Me encantará que tu nombre aparezca en la hoja de agradecimiento a los mecenas de “El fuego amigo” si así lo decides. Cada nombre es leña para este fuego y, a la vez, una responsabilidad que obliga a estar a la altura de vuestra confianza en cada movimiento.

Así pues, con la calma que da saber que ya lo hemos conseguido, sigamos ardiendo.

Gracias a los que ya alimentáis este fuego.

Gracias a los que queráis uniros a él.


Joel Reyes

No hay comentarios:

Publicar un comentario